Uno de las metas que nos vamos fijando como seres
humanos es lograr el éxito en todas aquellas acciones que desarrollamos, desde
el hecho de pasar una materia en el colegio, hasta lograr conquistar un amor
que creíamos imposible, pero ahora la pregunta a responder es saber ¿Cómo es
que se logra este éxito?
Pues bueno, desde mi punto de vista la vida nos va
presentando una serie de oportunidades, las cuales cada uno de nosotros decide
si las toma o no, y cada quien sabe hasta qué punto las podremos capitalizar.
El éxito podría considerarlo como la consecución de
estos dos factores, saber que tenemos un poco de suerte, pero conscientes que
el trabajo duro es que él nos va llevar a lograr el éxito.
Día con día nos levantamos de la cama sin tener la
más mínima idea de lo que nos va a deparar el destino, si bien es cierto la
noche o día anterior podemos realizar un sinfín de planes para el siguiente
día, sin embargo nos damos cuenta que desde el momento en que ponemos un pide fuera
de la cama todos los planes que habíamos realizado se van ir tornando de un
modo muy distinto al que creíamos. Con esto no digo que la meta que nos fijamos
o el objetivo que definimos como la consecución del éxito sea otro, sin embargo
los planes se van cambiando minuto a minuto.
Ahora bien, ¿Por qué digo que influye la suerte en
lograr el éxito?, pues bueno,
como le dije hace un momento los planes que vamos realizando se van modificando
con el tiempo, y es aquí donde viene la suerte, pues bien podríamos tener la
fortuna de que la actividad que realizamos se torne más fácil de lo que
pensamos y en consecuencia logremos llegar a la meta de una forma más rápida y
fácil, pero del mismo modo podríamos tener la mala suerte de que el trabajo a
realizar sea un poco más complicado de lo que habíamos planeado y nos cueste
más trabajo llegar a nuestra meta, sin embargo creo que lo importante aquí es
tener fija cual es nuestro objetivo o el éxito que logramos alcanzar, como lo
dice una frase "cambia los planes, más nunca
la meta".
A partir de lo anterior puedo decir que llegar al
éxito no es otra cosa más que aprovechar cada una de las oportunidades que te
va presentando la vida día con día, aprovechar esos chispazos de suerte y
capitalizarlos, y bien si no es buena suerte trabajar un poco más duro pero no
decaer hasta lograr el éxito.
Experiencias, circunstancias positivas o negativas
nos van forjando como personas, por ello hay que aprovechar las oportunidades que
se nos presenten y aprender de la adversidad, que poco a poco y paso a paso nos
iremos acercando más al éxito, sumando a ello un trabajo y esfuerzo duro.